limpieza dental

                                   Limpieza dental 

Si nunca te han hecho una limpieza dental profesional es lógico que las dudas te asalten y que con toda razón te preguntes si acaso duele, qué te van a hacer, si habrá riesgo de que te dañen los dientes o te lastimen las encías, si realmente es un procedimiento necesario aunque jamás olvides cepillarte los dientes, qué tipos de limpiezas existen y cuál será mejor, si te la pueden realizar teniendo implantes o brackets, y muchas otras preguntas más. Aquí trataremos de aclarar todas tus dudas.

Los especialistas recomiendan realizarse una limpieza dental profesional al menos una vez al año, pero de preferencia cada 6 meses, para prevenir la caries dental, mal alinento, gingivitis o enfermedad periodontal. El sarro y la placa no solamente se acumulan en la parte exterior de los dientes sino también sobre la línea de las encías y aún por debajo de ella.

Esto va provocando que las encías se separen de los dientes y se retraigan dejando superficies expuestas y desprotegidas. Esto, además de caries puede originar problemas de encías que con el tiempo conducen a la pérdida irreparable de los dientes.

Se dice que la limpieza profesional se debe realizar al menos una vez al año, pero hay que tomar en cuenta algunos factores personales. La formación de sarro y placa dental no solamente se debe a falta de higiene sino también a la química de la saliva y al tipo de alimentación de cada persona.

Una limpieza dental se puede efectuar ya sea en forma manual o con otras técnicas más modernas como el ultrasonido o con tecnología láser.

Una limpieza manual se hace con instrumental especial y se trata de raspar la superficie de los dientes así como bajo la línea de las encías para extraer el sarro y placa que puedan haberse acumulado. Esto es muy importante ya que de dejarlos allí se van formando bolsas que con el tiempo se infectan causando problemas.

Una limpieza con ultrasonido se efectúa con un instrumento que transforma ondas sonoras de alta frecuencia en energía mecánica en forma de rápidas vibraciones transmitidas por la punta del instrumento. Mediante ellas se desprende el sarro de los dientes y de la bolsa de las encías en un rápido y fácil procedimiento.

La tecnología láser permite alcanzar con mayor facilidad las incrustaciones más profundas.

Además de retirar el sarro y la placa, con la limpieza dental se deja la superficie de los dientes mucho más lisa por lo que las aplicaciones de flúor resultan más efectivas, y lo mismo sucede con el flúor contenido en las pastas y enjuagues bucales.

Las limpiezas dentales por lo general no causan dolor, aunque cuando se trata de incrustaciones profundas puede ser necesario utilizar algún tipo de anestesia local, al igual que cuando se trata de dientes muy sensibles. Una limpieza se realiza en un lapso de entre 30 minutos y una hora. Generalmente se hace en una sola sesión a menos que haya incrustaciones muy profundas, en cuyo caso pueden requerirse dos sesiones o más.

Una limpieza dental puede efectuarse sin problema aún cuando se lleven coronas o implantes.
En el caso de los aparatos de ortodoncia seguramente tu dentista te recomendará una limpieza profunda antes de colocar los aparatos. Durante el tratamiento el dentista llevará un monitoreo y te hará las recomendaciones pertinentes.

Es posible que en algunos casos, después de la limpieza dental queden los dientes con mayor sensibilidad, lo cual desaparece poco a poco en unos cuantos días.

Como ves no hay nada que temer en cuanto a la limpieza dental profesional por lo que no debes dejar pasar el tiempo tan solo por temor a sufrir alguna molestia ya que pones en riesgo tu dentadura y tu salud.